martes, 8 de enero de 2013

Decapitación de Ana Bolena

Una de las decapitaciones más famosas de la historia fue la de Ana Bolena, en 1536. La segunda esposa del rey Enrique VIII cayó de su gracia tras los rumores que la señalaban como adúltera; fue detenida, juzgada y sentenciada a muerte.
El matrimonio Kingston, encargado de la Torre de Londres, donde la reina estaba presa, relataron que Ana parecía muy feliz, y dispuesta a seguir su rutina. Ana Bolena fue la única en Inglaterra para la que no se empleó el hacha, por cortesía de Enrique VIII.
Se dice que, cuando lord Kingston le dio la noticia de que el rey había conmutado su sentencia de incineración por la de decapitación, y había contratado a un verdugo de Calais para la ejecución con una espada de doble filo, en lugar de degollar a una reina con el hacha común, Ana Bolena le dijo: "No tendrá mucho problema, ya que tengo un cuello pequeño. ¡Seré conocida como La Reine sans tête (La reina sin cabeza)!"
La mañana del 19 de mayo la llevaron a la Torre Verde, una sección donde se realizaban ejecuciones privadas. El gobernador de la Torre escribió al respecto: "Esta mañana me hizo llamar, a ver si yo podría estar con ella mientras comulgaba, con la intención de que la oyese y así dejar clara su inocencia. Y en la escritura de esto ella me llamó a mí, y a mi llegada dijo, ‘Sr. Kingston, oigo que no moriré antes del mediodía, y siento mucho por ello, ya que pensé estar muerta para esas horas y por delante de mi sufrimiento’. Le dije que esto no debería ser ningún sufrimiento, que sería muy breve. Y luego ella dijo: ‘Oí que dicen que el verdugo es muy bueno, y tengo un cuello pequeño’, y luego puso sus manos en el cuello, riendo cordialmente. He visto a muchos hombres y mujeres ejecutados, y que han estado en gran pena, y para mi conocimiento esta dama tiene mucha alegría en la muerte. Llevaba puesta una enagua roja bajo un vestido gris oscuro de damasco, adornado con pieles".Su cabello oscuro estaba recogido y llevaba su acostumbrado tocado francés. Ya en el cadalso, dio un breve discurso:
"Buena gente cristiana, he venido aquí para morir, de acuerdo a la ley, y según la ley se juzga que yo muera, y por lo tanto no diré nada contra ello. He venido aquí no para acusar a ningún hombre, ni a decir nada de eso, de que yo soy acusada y condenada a morir, sino que rezo a Dios para que salve al rey y le dé mucho tiempo para reinar sobre ustedes, para el más generoso príncipe misericordioso que hubo nunca: y para mí él fue siempre bueno, un señor gentil y soberano. Y si alguna persona se entremete en mi causa, requiero que ellos juzguen lo mejor. Y así tomo mi partida del mundo y de todos ustedes, y cordialmente les pido que recen por mí. Oh Señor ten misericordia de mí, a Dios encomiendo mi alma".
Entonces se arrodilló en posición vertical (en las ejecuciones al estilo francés, con una espada, no había ningún bloque para apoyar la cabeza). Su oración final consistió en repetir: "A Jesucristo encomiendo mi alma; el Señor Jesús recibe mi alma". Sus damas le quitaron el tocado y ataron una venda sobre sus ojos. La ejecución fue rápida, consistente en un solo golpe: según la leyenda, el verdugo (o esgrimidor) fue tan considerado con Ana que dijo, "¿Dónde está mi espada?" o "Mozo, trae mi espada" y luego la decapitó de un golpe, para que ella pensara que tenía todavía unos momentos más para vivir y no supiera que la espada estaba en camino.
El gobierno no aprobó proporcionar un ataúd apropiado para Ana. Así, su cuerpo y cabeza fueron depositados en un arca alargada y sepultados en una tumba sin marcar en la capilla de St. Peter ad Vincula. Su hija, la reina Elizabeth I, tras su llegada al trono, nunca se preocupó de rehabilitar su memoria y buscar un lugar más digno para descansar sus restos; su cuerpo fue identificado en unas reformas de la capilla bajo el reinado de la reina Victoria y de esta manera la tumba de Ana Bolena está marcado ahora en el suelo de mármol.
                                                                     Ana Bolena

4 comentarios:

  1. gran relato de la decapitacion de Ana Botella!!!

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  2. Concretamente en Tower Green, al sur de la Capilla de San Pedro ad Vincula, en la Torre de Londres.

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  3. Elisabeth I nunca mostró interés por su madre durante todo su reinado porque era una estrategía. La herencia al trono de Elisabeth estuvo en ascuas a mano de gente que quería arrebatarle el poder, ella tenía que mostrar deferencia por su padre para no ser vista cómo bastarda, no le convenía mostrar inclinación por su madre ya que esta murió en la deshonra. Pero Elisabeth siempre llevó un anillo que no se quitaba jamás y en su interior estaba el retrato de su madre

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